El Desierto del Wadi Rum, también conocido como el Valle de la Luna, es uno de los lugares más impresionantes que he visitado junto al enclave arqueológico de Petra.

Se trata de un valle desértico ubicado en una región montañosa en el sur de Jordania, formada por granito y arenisca.

El Wadi Rum es un lugar declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en el año 2011. Es conocido también por ser el escenario de rodaje para importantes películas tales como Lawrence de Arabia, Misión a Marte, Planeta rojo o The Martian.

Lo más recomendable y como ya teníamos incluido en nuestro tour, visitamos el Wadi Rum en 4×4, repartidos en pequeños grupos. Sugiero que dejéis conducir directamente a los locales, ya que os llevarán a los mejores sitios dentro del desierto y como expertos en conducir, evitaréis quedaros atrapados en la arena.

Es un lugar espectacular para realizar fotografías y tendréis tiempo suficiente para hacerlas. Su arena es particular, de color rojizo que se mezcla con los pilares marrones de montañas rocosas y algunos arbustos que forman parte del habitad.

Bajaréis del 4×4 con ganas de más después de haber descargado muchísima adrenalina. También tenéis la opción de hacer una ruta en camello, pero que yo personalmente decidí no hacer.

En el Wadi Rum se hayan jaimas de beduinos donde podéis comprar algunos souvenirs y además te invitarán a un té que no podéis rechazar. Aunque en nuestro tour no teníamos incluida la opción de pasar la noche en el desierto, existen algunos tours que sí incluyen pasar una noche allí. Sin duda es algo que recomendaría después de haber pasado unas horas en este maravilloso lugar en el sur de Jordania.

Jaima en Wadi Rum

Un desierto bastante diferente a otros que hayáis podido visitar. Nos despedimos del Wadi Rum con un baile de música típica y los simpáticos beduinos. Fue un momento muy agradable y divertido antes de continuar nuestra ruta hasta la ciudad de Aqaba.